LIBRO DE VISITAS

lunes, 14 de abril de 2014

14/04/2014

No sé qué ha pasado, pero ha sido retomar el blog y volver a ocurrir cosas, como:

Diez minutos antes de acabar el turno (7:50), se presenta una pareja de la policía preguntando por la habitación de un cliente hospedado. Lo primero que pensé era "le busca la Interpol por irse sin pagar de los hoteles", aunque más tarde pensé que "al tomarle los datos, a alguno de nosotros se le fue el dedo y cambio alguna cifra del DNI". A los veinte segundos (de reloj) llega otra pareja de la policia, y los cuatro se dirigen a la habitación del susodicho. Poco más se supo, salvo que justo cuando yo ya me iba, los cuatro policías también se iban del hotel, escoltando al cliente.

Y, para relajar la tensión, una anécdota más bonita:

Llama una clienta desde su habitación a recepción:

-Buenas noches. Le llamo desde la habitación 019. Les pedí que mañana nos despertaran, pero no recuerdo la hora que les dije. ¿Me lo pueden decir?
-Claro, señora *buscando en las anotaciones del día* Aquí tengo puesto que a las 7 y media.
-Gracias *cuelga*.

Si no te acuerdas de qué hora has pedido el despertador, pues sería que no tenías nada pensando que hacer para mañana. Vamos, digo yo, porque si tienes planes, tienes una idea muy aproximada del madrugón que te vas a dar, ¿no?